Se trata de un tratamiento dental que se realiza cuando la pulpa interna del diente está dañada o infectada. Durante este procedimiento, se remueve la pulpa afectada y se sella el conducto radicular para evitar futuras complicaciones.

La endodoncia es necesaria para preservar el diente y evitar su extracción. Se puede realizar en molares, premolares y dientes anteriores que presenten infección, caries profundas o lesiones en la pulpa dental.
Existen diferentes tipos de endodoncia, entre ellos:

1. Endodoncia convencional: Se realiza en dientes con raíces rectas y accesibles.

2. Endodoncia quirúrgica: Se lleva a cabo en casos más complejos, cuando la anatomía del conducto radicular es difícil de alcanzar o cuando se requiere un enfoque quirúrgico para tratar infecciones persistentes.

3. Retratamiento endodóntico: Se realiza cuando un tratamiento de endodoncia previo no fue exitoso o presenta complicaciones.

En nuestra clínica dental, nos destacamos por priorizar la experiencia, tecnología y materiales de alta calidad, junto con profesionales altamente cualificados. Utilizamos instrumentos de última generación, como localizadores de ápices electrónicos y motores rotatorios, que permiten un tratamiento más preciso y eficiente.

En cuanto a los materiales, empleamos materiales biocompatibles, asegurando un sellado hermético y duradero del conducto radicular.